Es probable que te hayas cruzado en tu vida con alguien que se consideraba superior o especial, que daba especial importancia a sus logros o atributos personales. Los delirios de grandeza no siempre son la única razón detrás de estas creencias, pero en ciertos trastornos psicológicos pueden manifestarse.

A continuación exploraremos en detalle los delirios de grandeza, su sintomatología, características y tratamiento.

¿Qué son los delirios de grandeza?

Los delirios de grandeza, o también llamados delirios megalomaníacos, son un tipo de delirio que implica creencias falsas e irracionales por las que una persona se siente superior, especial o dotada de algún talento o poder extraordinario.

Estas creencias no se corresponden con la realidad ni con la evidencia, pero la persona las mantiene con una convicción absoluta y no las modifica ante ningún argumento. Por lo tanto, no se trata de una muy alta autoestima, sino de una idea delirante que interfiere en la adaptación de la persona en la sociedad.

Los delirios de grandeza pueden tener un contenido religioso, político, artístico, corporal o de cualquier otro tipo. Por ejemplo, una persona puede creer que es Dios, el presidente del mundo, un genio de la música, el más bello o el más inteligente. Estos delirios pueden formar parte de trastornos psicóticos como la esquizofrenia o el trastorno delirante, o de trastornos de la personalidad como el narcisista.

Delirios de grandeza: características

Aunque los delirios de grandeza pueden adoptar diferente contenido, mantienen algunas características comunes en todas las presentaciones, lo que permite identificarlos y reconocerlos. Algunas de ellas son:

1. Implican la creencia de ser o tener un estatus superior al resto

La persona cree tener una identidad especial o una misión importante que la distingue de los demás. Por ejemplo, puede pensar que es un profeta, un genio, un líder o un héroe.

Otras personas con delirios de grandeza no tienen este tipo de creencias sobre sí mismas, sino que más bien afirman tener una relación con personas “superiores”, como una figura política, un famoso o incluso con Dios.

2. Se asocian con un optimismo exacerbado

Las investigaciones han encontrado unas expectativas elevadas sobre eventos positivos en el futuro y la tendencia a pensar que todo va a ir bien en personas con delirios de grandeza.

3. Rigidez cognitiva y resistencia al cambio

La persona con delirios de grandeza no acepta ningún argumento que contradiga su creencia delirante, sino que la defiende con firmeza y convicción. Incluso puede interpretar la oposición o el rechazo como una prueba de su singularidad o de la conspiración en su contra.

Algunas hipótesis defienden que esta rigidez cognitiva podría tener que ver con el afrontamiento de emociones intensas o con el desarrollo de la autoestima.

4. Comportamiento extravagante y arriesgado

La persona puede tener un comportamiento extravagante, arriesgado o desproporcionado, acorde con su creencia delirante. Por ejemplo, puede gastar grandes cantidades de dinero, involucrarse en proyectos imposibles o desafiar a la autoridad.

5. Presencia de otros síntomas psicóticos

La persona puede presentar otros síntomas psicóticos, como alucinaciones, paranoia o ideas de referencia, que refuerzan su delirio de grandeza. Por ejemplo, puede escuchar voces que le dicen que es especial o ver señales que le indican su destino.

6. Pueden darse en diferentes condiciones

La presencia de delirios podría constituir en sí misma un trastorno psicótico en ausencia de otros síntomas, como las alucinaciones. No obstante, es bastante frecuente encontrar este contenido en personas diagnosticadas de esquizofrenia, o trastorno bipolar.

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¿Cuáles son los tipos de delirios?

Los delirios de grandeza son solo un tipo de delirio, ya que estos pueden incluir diferentes temáticas según el contenido de la creencia delirante. Algunos de los tipos de delirios más comunes son los siguientes:

1. Delirio erotomaníaco o Síndrome de Clerembault

En este deliro, la persona cree que otra persona, generalmente de un estatus superior o famosa, está enamorada de ella, aunque no exista ninguna prueba de ello. Una persona con erotomanía puede intentar contactar con el objeto de su delirio o interpretar cualquier gesto como una señal de amor.

2. Delirio celotípico

La persona cree que su pareja le es infiel, sin tener ninguna razón para sospecharlo. La persona puede vigilar, interrogar o acusar a su pareja constantemente, lo que puede generar conflictos y rupturas.

3. Delirio de grandeza

Como hemos visto, la persona cree que tiene un poder, un talento, un conocimiento o una identidad especiales, que la hacen superior a los demás.

4. Delirio somático

Es una creencia falsa referente al funcionamiento del propio cuerpo. La convicción de una mujer menopáusica de estar embarazada o la creencia de una persona sana de tener una enfermedad grave son ejemplos típicos de este delirio.

5. Delirio persecutorio

En el litio persecutorio, como su nombre indica, la persona cree que está siendo amenazada, vigilada, perseguida o dañada por alguien o por algún grupo. La persona puede sentirse paranoica y desconfiar de los demás, o intentar defenderse o escapar de sus supuestos perseguidores.

6. Delirio mixto

La persona tiene más de un tipo de delirio simultáneamente o alternativamente. Por ejemplo, puede creer que es el elegido para una misión especial (delirio de grandeza) y que hay personas que quieren impedírselo (delirio persecutorio).

El primer delirio más frecuente es el de temática persecutoria, seguido de los delirios de grandeza.

¿Cómo se comporta una persona con trastorno delirante?

El comportamiento de una persona con trastorno delirante puede variar según el tipo y el contenido de su delirio. Sin embargo, algunas características generales que pueden observarse son las siguientes:

La persona suele estar muy centrada en su delirio y lo expresa con frecuencia y con convicción. Puede buscar información o pruebas que apoyen su creencia delirante y rechazar o ignorar las que la contradigan.
Puede tener dificultades para relacionarse con los demás, especialmente con aquellos que no comparten o cuestionan su delirio
También puede actuar de forma inadecuada, arriesgada o agresiva, según el contenido de su delirio. Por ejemplo, puede gastar dinero de forma compulsiva, involucrarse en proyectos irracionales, acosar a alguien que cree que le ama o atacar a alguien que cree que le persigue.
Por último, puede tener problemas para adaptarse a las normas y a las exigencias de la vida cotidiana. Puede descuidar su higiene, su salud, su trabajo o sus responsabilidades.

Estas conductas causan malestar y deterioro en la persona con trastorno delirante y en su entorno. Por eso es importante buscar ayuda profesional lo antes posible para iniciar un tratamiento adecuado.

¿Cómo tratar a una persona con delirio de grandeza?

Rara vez una persona con delirios de grandeza o cualquier otro tipo buscará ayuda. Por ello, tratar a una persona con delirio puede ser un reto, ya que esta suele estar muy aferrada a su creencia delirante y puede reaccionar de forma negativa u hostil ante cualquier intento de cuestionarla o modificarla.

No obstante, si tienes una persona cercana con este tipo de delirios, existen algunas pautas generales que te pueden ayudar a establecer una relación de confianza con ella:

Muestra respeto y empatía, intenta comprender cómo se siente la persona y qué significado tiene para ella su delirio.
Anímala a buscar ayuda profesional lo antes posible. Respeta su decisión de aceptar o rechazar el tratamiento, pero infórmale de los beneficios y los riesgos de cada opción.
Cuídate a ti mismo. No te sientas culpable ni responsable por el delirio de la persona. De vez en cuando también está bien reconocer tus propios límites y necesidades.

¿Y tú? ¿Conoces a alguien con delirios de grandeza?

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Los delirios de grandeza y los comportamientos que los acompañan pueden ocasionar problemas a la persona que los sufre y a su entorno más cercano. Por ello, es importante que cuenten con apoyo social y profesional adecuado a sus necesidades.

Si identificas a alguien de tu entorno con delirios de grandeza, muestra tu apoyo. Si crees que necesita ayuda profesional, estamos para ayudarle.

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